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La serie belga más internacional y más seguida vuelve con su segunda temporada
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Enemigo Público regresa con la intención de seguir jugando con el límite de la doble moral del ser humano
Enemigo Público llegó como una de las series revelación europeas. La serie coge influencia del nordic-noir con una policía como protagonista. Chloe tiene un pasado traumático que a día de hoy le produce pesadillas y alucinanciones. El trabajo la une a un pederasta que es aceptado en un monasterio en libertad condicional tras 20 años de prisión. A partir de entonces, todos los tópicos desaparecen y la tensión, la sorpresa y los complejos personajes se adueñan del espectador.
Esta segunda temporada…
Un nuevo enemigo. Los mismos fantasmas. Dos años después de lo ocurrido en la primera temporada, los límites entre lo personal, lo moral y lo profesional vuelven a estar difusos para la inspectora Chloé Muller, que debe enfrentarse a un nuevo caso: la desaparición de una niña a manos de un retorcido criminal conocido como el «comerciante de juguetes». ¿Quién mejor para ayudar a Chloé a meterse en la mente del asesino que el propio Guy Béranger…?
Más allá de un crimen
‘Enemigo público’ (Ennemi public) es la serie belga más internacional, y la más vista del ‘prime time’ televisivo en su país. Una gran producción con una vuelta de tuerca al ‘nordic noir’ habitual, que va más allá de la premisa de un asesinato en un pueblo pequeño donde todos sospechan de todos. La serie plantea cuestiones interesantes como la doble moral del ser humano y la religión, la búsqueda de redención personal y los prejuicios.
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